El Limonero

No te agobies más… tu Organización solo requiere de tus 10 mejores segundos para ¡romper más récords! Conoce el Time Modeling

Imagina la sensación de éxito que experimentaron personas como Florence Griffith-Joyner, o Usain Bolt, al lograr los máximos récords mundiales en la prueba de los 100 metros planos… seguramente las gratas emociones de esos momentos superaron con mucho, la amplia gama de experiencias y de desafíos que vivieron y superaron en los procesos de entrenamiento y de preparación.
Imagina la sensación de éxito que experimentaron personas como Florence Griffith-Joyner, o Usain Bolt, al lograr los máximos récords mundiales en la prueba de los 100 metros planos… seguramente las gratas emociones de esos momentos superaron con mucho, la amplia gama de experiencias y de desafíos que vivieron y superaron en los procesos de entrenamiento y de preparación.

Tal vez estés de acuerdo que podríamos llegar a pensar que al ganar y al superar sus propios logros previos, vieron que todo el tiempo dedicado para cada segundo de su competición habría valido la pena. 

Ahora piensa en la posibilidad de que tú mismo pudieras vivir una y otra vez, esa sensación de éxito en tu actividad directiva… 

Tú bien sabes de lo que estamos hablando. Recuerda esa junta en la que las ideas que se dieron con tu equipo de colaboradores, les llevaron a consolidar ese gran plan que logró maravillosos resultados; piensa en ese momento de inspiración que te llevó a generar una serie de medidas para mejorar el alto desempeño de la Organización; vuelve a disfrutar de esa iniciativa que provocaste en la empresa y que llevó al equipo a ser más efectivo en su accionar y que los hizo superar  metas que luego festejaron. 

Si lo ves, esos momentos fueron para ti, lo que para esos atletas significaron los 10 segundos de la carrera. Hay coincidencias muy significativas en el caso de esas personas y en el tuyo, velo así… seguro coincidirás en que:

  • Primero que nada, tuvieron y se dieron el tiempo para ¡ir a competir!
  • Dedicaron tiempo a prepararse.
  • Consideraron en su preparación, muchas acciones y medidas que incluso iban más allá de solo correr. Todo fue más integral.
  • Planearon su agenda de preparación con la visión y objetivos claros, sumado a prioridades establecidas.
  • Entendieron muy bien en qué deberían concentrarse.

¿Lo notas? Cuando llevamos estas medidas a un plano directivo y gerencial, prácticamente todo coincide. 

En nuestras actividades organizacionales la analogía deportiva es compatible, ya que las buenas decisiones, las buenas ideas y las acciones correctas, requieren sí, de metodologías, talento, información, tecnología, etc…, pero sobre todo necesitan de que tú, por lo menos tú, cuentes con el tiempo para que por un lado, la preparación para lograrlas pueda darse, y que por otro, estés listo para la prueba de los “10 segundos”.

Lo importante es no perder de vista que lo que se requiere de ti, realmente no es una gestión del tiempo para cada uno de los 365 días del año… de hecho tal vez uno de los principales errores que se generan al aplicar mal las técnicas de administración del tiempo, es que solemos centrarnos en administrar mejor lapsos de acción cotidiana a fin de que “nos dé tiempo” de hacer lo que es importante, urgente, etc. Cuando para los niveles directivos, la gestión efectiva del tiempo va en el sentido de aprovechar este recurso de la mejor manera todos los días con un enfoque especial que sirva para acondicionar mejor tu participación estratégica y que se centre en habilitar tu máximo aporte cuando este se requiera.

Digamos que Lemon tree propone un Time Modeling que no busca tanto el ayudarte a organizar tu agenda diaria y a distribuir tiempos y tareas, sino a impulsarte a saber cómo gestionar el tiempo en enfoques clave para habilitarte mejor para esos sprints de talento que se requieren de ti.

Así, cuando trabajas sobre el concepto de Time Modeling, lo que priorizas es:

  • Tener los espacios de tiempo para generar ideas: momentos de inspiración.
  • Tener tiempo dedicado a la generación de estímulos y de entornos que generen el mejor hábitat para la creación y evolución de las ideas.
  • Romper con costumbres poco efectivas y hasta desgastantes de tu energía. Hay una frase común del basquet ball que dice “Usualmente el que más corre, no es el que mejor juega”; frase que claramente habla de saber colocarse, de saber estar en el momento y lugar correcto, en la posibilidad de aportar desde la espontaneidad – que surge después de dedicar tiempo a la preparación integral del jugador -. La verdad es que más horas en el trabajo, más desvelos, trabajar en momentos que podrían ser de descanso y personales, no te hará del todo más efectivo; por el contrario, es posible que entres en el conocido efecto del burnout junto con tus colegas…

Si te fijas, estas prioridades ayudarán a que puedas dar oportunidad a la germinación de mejores ideas y de buenos planteamientos para el accionar hoy y hacia el futuro, con la tranquilidad de que generarlas usualmente no tomará mucho tiempo, debido a que antes habrías modelado acciones preparativas que abrirían espacios y que propiciarían instantes donde tu capacidad de inspiración esté más fortalecida. Considera que al igual que con los corredores de 100 metros planos que se preparan por años, y de la mejor forma para acudir a una prueba en los juegos olímpicos que durará alrededor de 10 segundos, tu aporte directivo más valioso, requerirá de una buena preparación, con espacios y hábitos, respaldados en un buen uso del tiempo durante todo el proceso, para que de tu figura organizacional puedan surgir esos instantes de alto valor cuando se requiera.

Para poder concretar esta idea con éxito, se requiere que establezcas algunas referencias clave y que te centres en algunos enfoques sobre el uso de tu tiempo, que te prepararán para la ¡gran prueba de los 10 segundos!

Lo primero que queremos recomendarte, es que definas a consciencia, cuál es (o cuál debería), ser tu aporte más relevante. Muchas figuras directivas piensan que su aporte está en mantenerse cerca de la operación; que su mejor ayuda al equipo es dar seguimiento para que las cosas sucedan… pero en muchos casos, no piensan en que de esos roles lo que se espera es creatividad en la solución de retos, de mejores vías de gestión del negocio, de nuevos modelos de trabajo y negocio, de otros panoramas de impulso y desarrollo, etc… Aportes que surgen cuando la figura directiva “tiene tiempo de pensar”, cuando se puede centrar en “ver a través de la ventana” de la Organización, para visualizar escenarios.

Como segundo paso, te recomendamos aplicar el Modelado y el Pensamiento Estratégico. En este punto, como siempre lo hemos propuesto en Lemon tree, los niveles directivos deben contar con grandes destrezas, ya que será clave definir la Visión a lograr en cierto tiempo, con los objetivos a concretar, con la claridad de prioridades que enfoquen al equipo de colaboradores, dentro de un plan de acción. Si esto se da, la ruta quedará planteada y el avance de la Organización podrá consolidarse.

Pero, ¿qué pasa con nuestro propio time modeling como directivos de la Organización?

Pues que podremos gestionarlo mejor si dentro de la planeación de actividades especialmente tuyas, se integra la gestión de estas 6 micro-metas, a las que te recomendamos dedicar tiempo.

Estas son las micro-metas a las que será muy importante que les dediques tiempo:

  • Saber. Con esta recomendación lo que buscamos es que leas más artículos, libros -no solo de negocios-, que puedas ampliar más tu panorama integrándote a seminarios, masters, diplomados, etc… La creatividad y las buenas ideas surgen de la conexión de conocimientos en tu mente… nutre esa fábrica fantástica que tienes.
  • Idear. Piensa, piensa mucho. Dibuja, escribe, conversa, imagina. Idear soluciones es probablemente el motivo principal de tu función. Sin embargo te sorprendería saber cuántas personas en niveles directivos no tienen técnicas -ni tiempo- para alimentar esta competencia.
  • Vincular. Las personas somos las que hacemos que las cosas sucedan. Los vínculos permiten comunicación, fortalecen la participación y el compromiso, permiten conocer lo que otros piensan y observan. Dedicar tiempo a la gestión de vínculos es más efectivo de lo que muchas veces se piensa. Es frecuente ver en la gestión de vínculos “tiempo perdido para el negocio”… y no hay nada más equivocado.
  • Relajar. Esta es una recomendación clave. Las neurociencias plantean los beneficios de la gestión del estrés, los beneficios de caminar para impulsar la generación de ideas, los aportes del distrés, las ventajas de hacer pausas no solo físicas o kinestésicas, sino mentales, con ayuda por ejemplo de la meditación.
  • Transmitir. No creemos que pudiera haber peor escenario que nos llevara a querer entrenar para una competición olímpica en ambientes caóticos, en espacios bulliciosos sin pies ni cabeza, sin el apoyo de las personas que nos rodearan, con retroalimentación no positiva sobre nuestras intenciones… Pero sí creemos que trabajar en un ambiente con la cultura organizacional que propicia la gestión del tiempo a favor de aprovechar la inspiración más que la transpiración… y que impulsa los hábitos y rutinas clave, más que las costumbres del trabajar por trabajar, ayudará a que tú y tu equipo de colaboradores puedan consolidar ese hábitat que permite que las ideas germinen.
  • Aprovechar. Esta es una era de alta disponibilidad de recursos como la internet y las plataformas que nos permiten estar virtualmente casi en cualquier lugar, en cualquier momento; pero… eso no significa que esta ubicuidad de manera directa se pueda relacionar con mayor productividad y efectividad. Si bien la tecnología nos permite aprovechar muchos beneficios de conectividad, de comunicación y de control, es conveniente no abusar de ello. El fenómeno de burnout y temas como el absentismo laboral, son causados en buena medida por un lado, por la sobresaturación de las personas en el uso de los recursos tecnológicos, y por otro, por la necesidad de “hacer más con menos” que nos plantean épocas desafiantes como las que vivimos. Es en este sentido en que la gestión del tiempo para aprovechar los recursos, basada en la conformación de un buen modelado estratégico toma especial relevancia. Pero hay otro ángulo del tema… el que nos deja aprovechar la tecnología y nuestra creatividad estratégica para: desplazarnos menos, comunicarnos mejor, reducir tiempos improductivos, trabajar por flujos armónicos de procesos, enfocar las actividades de las personas, trabajar pensando en el bienestar que todas las personas de nuestras organizaciones necesitamos y por el cual nos esforzamos. 

Algo a considerar es que aplicar las técnicas de administración del tiempo que muchos autores han desarrollado de manera genial es bueno, pero recomendamos especialmente que no dejes de centrar tiempo para la gestión de las 6 micro-metas que te planteamos. Si lo haces, las constantes “pruebas de 10 segundos” a las que te enfrentarás en la Organización, concluirán con tu presencia en el podio de medallas.

Enfócate en esto:

  • Busca ganar más tiempo para lograr las 6 micro-metas que te proponemos. Con eso ya das un enorme paso a la gestión más efectiva de tu tiempo de cara a hacerlo más provechoso.
  • Aplica la técnica de sprints. No trabajes con ritmos maratónicos.
  • Define objetivos claros con alcances precisos de cada momento y actividad. Evita extenderte por no tener claro eso.
  • Respeta tu agenda. La puntualidad no es una opción.
  • Deja espacios para la relajación. Muchas veces eso trae mejores resultados en un nivel directivo, que lo que brinda en resultados ese mismo tiempo “trabajando”.
  • Califica cada actividad con criterios como: “Operativa”, “No era necesario que la hiciera yo”, ”Creativa”, “Decisiva”, “Rutinaria”, “No productiva”, etc… , y revisa en qué se va tu tiempo, y balancea.
  • Toma decisiones de lo que debes hacer tú o de lo que no debería tomarte tiempo a ti. Luego delega, reorganiza, y sobre todo sé realista y honesto contigo en este análisis. 

Solo tenemos en nuestras manos realmente el momento que vivimos y podemos aprovechar ese instante como tal, pero también podemos hacer que ese momento nos ayude a moldear los días que vienen.

Modelar el tiempo y ponerlo a tu favor, irónicamente no requiere de mucho tiempo… si generas los hábitos y rutinas clave más apropiadas. Prueba y verás.

BY LEMON TREE